Star Wars: El Ascenso de Skywalker

Estreno Original: Diciembre 20, 2019
Director: J. J. Abrams
Guión: J. J. Abrams, Chris Terrio
Reparto: Adam Driver, Daisy Ridley, John Boyega, Oscar Isaac, Carrie Fisher, Mark Hamill, Anthony Daniels, Naomi Ackie, Domhnall Gleeson, Richard E. Grant, Lupita Nyong’o, Keri Russell, Joonas Suotamo, Kelly Marie Tran, Ian McDiarmid, Billy Dee Williams.

Como hemos visto en los trailers, los rumores sobre la muerte del emperador Palpatine han sido exagerados. Y con la Primera Orden uniendo fuerzas con la flota secreta de Palpatine para convertirse en la Última Orden, lo que queda de la Resistencia tiene prisa por derrotarlos de una vez por todas. Rey y sus amigos están a cargo de encontrar dónde está Palpatine, mientras que Palpatine le encarga a Kylo Ren que la traiga a él.

Star Wars: El Ascenso De Skywalker es la última película de la trilogía más reciente y también la última de la «saga Skywalker». También es una película con varios problemas.

Comenzando con el trágico fallecimiento de Carrie Fisher, un pilar de la franquicia Star Wars , y cuyo personaje, Leia Organa, se suponía que tendría un papel clave en  El Ascenso De Skywalker, al igual que Han Solo lo tuvo en El Despertar de la Fuerza y Luke Skywalker en Los Últimos Jedi. Al final, se usaron en la película imágenes no utilizadas de Fisher de El Despertar de la Fuerza.

Luego estaban los problemas de producción en sí, que se suponía iba a tener una historia base creada por el escritor / director de Los Últimos Jedi , Rian Johnson. Pero para cuando Colin Trevorrow empezara a trabajar director y coguionista de El Ascenso De Skywalker, Johnson declaró que no tuvo ninguna participación. Y luego Trevorrow dejó la producción debido a «diferencias creativas» (se rumorea que los guiones eran terribles). La película, anunciada para el 24 de mayo de 2019, se retrasó hasta el 20 de diciembre de 2019, y J.J. Abrams regresó como director y coguionista.

¿Y se necesitaba contar toda esta historia antes de una reseña? No realmente. Solo es fue un extra añadido a todos los problemas que esta película tiene en comparación con los dos primeras. Porque sí,  El Ascenso De Skywalker no es tan buena como éstas.

Pero, ¿es una mala película?  No realmente. 

Todos los aspectos técnicos estaban a la par para una película de este calibre. La producción fue de primera categoría, y se mostró en como el total espectáculo que es gracias a sus nuevos escenarios, luchas de sables de luz, y batallas de naves espaciales. Todos estos fueron visualmente creativos e introdujeron nuevos elementos, como la «nueva evolución» en el vínculo de Kylo Ren y Rey. Además, la banda sonora de John William, la última que hará para Star Wars , estaba en su punto, incluso si no sobrepasa lo que se espera. Finalmente, los nuevo personajes fueron, en su mayor parte, útiles y entretenidos.

De hecho, una de sus mayores fortalezas de la película fue la actuación tanto de los personajes antiguos como de los nuevos. Claro, el guión podía llegar ser cursi (lo que es normal para Star Wars) o lleno de bromas (que es más cosa de Marvel que de Star Wars), pero los actores lo hacían funcionar con actuaciones exageradamente intensas en el caso de los malos, o con un gran carisma y química en el caso de los buenos.

Teníamos a Jannah (Naomi Ackie) con sus fantásticas interacciones con Finn (John Boyega), con quien se amistó a través de experiencias compartidas. Ella no sólo estaba involucrada en la acción, sino que tenía cierto aire de inocencia bajo su duro exterior. Lamentablemente, Zorii Bliss (Keri Russell) no tuvo un papel tan importante, pero nos dio una historia de fondo para Poe Dameron (Oscar Isaac). Y lo más importante, nos presentó a Babu Frik (con la voz de Shirley Henderson), quien fue el personaje revelación en mi opinión. Se robó las escenas en donde aparecía, además de poseer gran química con C3PO (interpretado una vez más por Anthony Daniels) en esos pocos momentos compartidos. Hablando de C3PO, ¡no solo tuvo grandes líneas, sino también un arco de personaje real!

En cuanto a los malos, teníamos al General Colegiado Pryde (Richard E. Grant), que estaba allí para desempeñar el papel del malvado oficial con acento inglés, ahora que el General Hux (Domhnall Gleeson) tenía un papel diferente que jugar teniendo en cuenta su situación al final de Los Últimos Jedi . Y luego estaba Ian McDiarmid, que volvió para interpretar a un debilitado pero no menos histriónico Palpatine. Sí, es tan intenso como lo recordamos, incluso si su presencia nunca encaja totalmente.

En cuanto a los personajes clásicos, me alegro de que lograran mantener a Leia (Carrie Fisher) en la película, gracias no solo a las escenas que consiguieron rescatar de lo que tenían, sino también con la ayuda de un poco de trabajo de cámara y dobles del cuerpo, así como retoques digitales en cierta escena. Además, sin tratar de hacer mucho spoiler, tanto Luke (Mark Hamill) como Han (Harrison Ford) estuvieron allí para conmovernos con sus respectivos momentos. Y oye, Billy Dee Williams como Lando Calrissian estuvo de vuelta y, aunque no hizo mucho, ayudó avanzó un poco la trama, y tuvo un papel relevante al final de las cosas.

Pero en el núcleo de todo esto teníamos a Daisy Ridley y Adam Driver, cuya relación entre sus personaje a lo largo de toda la película nos dieron maravillosas fantásticas con diferentes tipos de conflictos: físicos, emocionales y mentales. Y mientras ambos estaban haciendo un buen trabajo, para cuando todas las piezas estaban en su lugar y la resolución de sus respectivos arcos de personajes estaba llegando a su fin, fue Driver quien brilló con luz propia.

Sí, algunos elementos del guión se sentían como si J.J. Abrams estuviera haciendo malabarismos de las ideas que creó en El Despertar de la Fuerza con la forma en que las cosas terminaron en Los Últimos Jedi (y el fallecimiento de Carrie Fisher), y terminó como si tuviera demasiada trama para una sola historia. Y sí, es por eso que la primera media hora se sintió apresurada, y el ritmo estaba por todas partes, con una búsqueda tras otra, salpicada de escenas de persecución e ideas que quedaban de lado. Pero me divertí con el espectáculo, y los momentos emotivos clave funcionaron bien en su mayoría.

El Ascenso de Skywalker es una película decente y, aunque esperaba un mejor final para la saga, definitivamente puedo verme a mí misma viéndola una y otra vez, y estar tan entretenida como la primera vez.

Y además, si Disney Plus puede darnos más historias como The Mandalorian, el universo de Star Wars tendrá para rato.

Rating:  

Esta película está dedicada a Carrie Fisher, y es posible que se me saliera una lágrima cuando tal texto apareció en la pantalla.